Begoña LLoréns Macián Begoña LLoréns Macián

La CAA nos ayuda a expresar y gestionar mejor las emociones

A lo largo del desarrollo del niño, éste va aprendiendo mediante experiencias propias, a identificar sus emociones y posteriormente a gestionarlas. En la adolescencia, se da un cambio a nivel neuronal muy importante, donde madura la capacidad de raciocinio, y el control emocional entre otros. Desde la Neuroeducación sabemos, que un adolescente cuando muestra cierto “descontrol” emocional, significa que está madurando emocionalmente. Pero, ¿qué o ocurre si este “descontrol” emocional lo vive una persona con dificultades en la comunicación? ¿Cómo expresarlo? ¿Cómo gestionar su conducta en ese momento? ¿Estamos seguros de que sabe lo que se espera de él/ella?

Las Historias Sociales consisten en información visual clara y ordenada, que permite a la persona tener presente en todo momento o poder consultarlo cuando lo necesite, qué debe o no debe hacer, o qué se espera de él/ella cuando la emoción puede aflorar de forma desadaptativa. Para las personas con Trastorno del Espectro del Autismo (TEA), este apoyo visual supone un recurso imprescindible. Aún cuando no estén utilizando todavía un SAAC para expresarse, o utilicen el habla como principal forma de expresión.

Si además esa historia social, elaborada con el apoyo visual que cada uno necesita (palabra, pictograma, fotografía,…)  la acompañamos de música, y la cantamos, escuchamos o bailamos en diferentes momentos para ir aprendiéndola, lograremos que el adolescente la integre mucho mejor y la pueda poner en práctica llegado el momento. Éste vídeo y canal de Youtube es un ejemplo fantástico para apoyar estas historias sociales. ¡No te lo pierdas!

 

¿Te atreves a crear tus propias canciones en español?